Cambio de tercio

Volar en avión privado con nosotros es jugar con ventaja

Los viajes de lujo de alta gama sufrieron mucho menos durante la pandemia que los del mercado de masas. Esto se debió en parte a que algunos de los costes más prohibitivos -como las pruebas PCR antes y después del viaje- son proporcionalmente menos difíciles de asumir por los clientes. Pero también porque, respecto a la pandemia, los viajes de lujo de alta gama presentan menos riesgos. Volar en un avión privado reduce el riesgo de contraer el Covid-19 en un avión o en una terminal aeroportuaria muy concurrida. Del mismo modo, el aforo de los complejos turísticos de lujo suele ser más limitado, lo que les permite tener más espacio por cliente.

El volumen de solicitudes está sin duda aumentando, aunque obviamente aún no estamos fuera de peligro. Sin embargo, aquellos que durante este último par de años se decantaron por algo más exclusivo pueden haber propiciado un nuevo tipo de viaje: uno que puede animar a que ciertos hábitos de viaje previos a la pandemia no vuelvan fácilmente.

Las restricciones actuales debido a la Covid-19 son lo que más preocupa a cualquier cliente que quiera viajar ahora: ¿cuáles son los requisitos de entrada? ¿Qué hay que tener en cuenta mientras se está en destino? ¿Qué se debe hacer al regreso? Un descuido en cualquiera de estos puntos puede costarle un disgusto. Por este motivo, los clientes quieren contar con un experto como ACS para orientarles y mantenerles informados en todo momento sobre todo lo que haga falta. En ACS informamos detalladamente al cliente sobre lo que debe hacer, le ponemos al tanto de cualquier cambio previo a su viaje, revisamos el plan de vuelo con 72 horas de antelación y le comunicamos los cambios en los requisitos durante su permanencia en el extranjero. La tranquilidad se ha convertido en un auténtico lujo.

Los clásicos de siempre siguen siendo apuesta segura y cuanto más grande, mejor.

Nuestros clientes siguen eligiendo destinos de ocio que ya eran populares antes: Islas Turcas y Caicos, San Bartolomé y San Martín, las Granadinas en el Caribe, las Maldivas en el Océano Índico y, durante el verano europeo, la Costa Azul, Miconos y Cerdeña. Sin embargo, estamos viendo que hay una mayor demanda de alojamientos más grandes dentro de los hoteles de gama alta: por ejemplo, villas de lujo con varias habitaciones como en los complejos de Aman o Belmond en el Caribe. Aunque estén lejos, los clientes quieren sentirse como en casa sin dejar de disfrutar de las comodidades y los niveles de servicio que uno esperaría en un complejo turístico de categoría mundial.

Cuando en noviembre de 2021 se levantaron las restricciones para viajar a Estados Unidos, nuestros clientes corporativos regresaron en avalancha. Para cuando se permitió de nuevo la entrada al Reino Unido, había muchísimo trabajo pendiente y acuerdos que cerrar.

Me interesa ver si crece la demanda de Arabia Saudí, que recientemente ha puesto mucho empeño en abrir sus fronteras al mundo y ha eliminado muchas de sus anteriores restricciones para entrar. Su campaña turística "See The Unseen" ha captado sin duda la atención de las agencias de viajes y operadores turísticos del Reino Unido. Arabia Saudí ha invertido una enorme cantidad de dinero para crear un nuevo paisaje turístico, sobre todo en la costa occidental. Será interesante seguir esta evolución viendo el éxito que han tenido los Emiratos Árabes Unidos para atraer visitantes durante los últimos años.

La pandemia ha dejado huella

En cuanto al comportamiento de los clientes, no creo que la gente afronte los viajes internacionales como seguramente lo solíamos hacer todos antes de que empezara la pandemia. Hemos recordado la importancia de unas buenas vacaciones tras un periodo prolongado sin poder disfrutarlas. Creo que la gente dará ahora prioridad a la experiencia sobre el coste para optimizar la calidad de su tiempo de ocio.

Será interesante ver cómo responde el mercado de los viajes de empresa, ya que en los dos últimos años se han producido grandes mejoras en la tecnología de las reuniones virtuales. ¿Se han replanteado las empresas su gasto en viajes internacionales? ¿O las restricciones a los viajes han puesto de manifiesto que no hay nada que sustituya a una visita de negocios en persona? Los primeros indicios apuntan a que la gente vuelve a viajar por trabajo, lo cual es una buena noticia para muchas agencias cuyos ingresos dependen de este mercado.

En cuanto a nosotros, aquí en ACS, esperamos un mayor crecimiento en la demanda de nuestra gama de productos. Con un número cada vez mayor de personas de alto poder adquisitivo en todo el mundo y con más clientes que recurren a la aviación privada o a las cabinas premium en los vuelos regulares, esperamos el aumento de personas que busquen contratar el servicio de alta gama que podemos ofrecer y los increíbles viajes que podemos organizar.

Para saber más sobre los viajes únicos que ACS puede organizar, visite aircharterservice.es

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